¿Qué te impulsa a apostar una y otra vez, incluso cuando sabes que estás perdiendo dinero, tiempo y salud? ¿Qué hace que no puedas controlar tus impulsos y te sientas incapaz de dejar de jugar? Si te has hecho estas preguntas alguna vez, es posible que sufras de adicción al juego o ludopatía. Se trata de un trastorno que afecta a millones de personas en el mundo y que puede tener graves consecuencias para tu vida personal, familiar, laboral y social.
Si crees que puedes tener una adicción al juego, o conoces a alguien que pueda tener, no dudes en pedir ayuda profesional. En el centro de rehabilitación de la ludopatía del Instituto Europeo Alfi, te ofrecemos un tratamiento personalizado y de calidad, con un equipo de expertos en adicciones. Contacta con nosotros y te ayudaremos a recuperar tu libertad y tu felicidad.
¿Qué es la adicción al juego?
Se trata de una forma de adicción comportamental, es decir, que no implica el consumo de sustancias, pero que tiene un impacto similar en el cerebro y en el organismo. El juego activa el sistema de recompensa del cerebro, liberando dopamina, una sustancia química que produce placer y motivación. Sin embargo, con el tiempo, el cerebro se adapta a esta estimulación y necesita cada vez más dosis de juego para obtener el mismo efecto. Así se crea una dependencia psicológica y física que dificulta el abandono del hábito.
La adicción al juego se clasifica como un trastorno del control de los impulsos, que se caracteriza por la incapacidad de resistir un impulso, una tentación o una necesidad de realizar una acción que es perjudicial para uno mismo o para los demás. La adicción al juego también se conoce como ludopatía, un término que proviene del latín ludus (juego) y del griego pathos (enfermedad).
La ludopatía puede afectar a cualquier persona, independientemente de su edad, sexo, nivel educativo, cultural o socioeconómico. Sin embargo, existen algunos factores que pueden aumentar el riesgo de desarrollar este problema, como veremos a continuación.
Causas y factores de riesgo de la adicción al juego
No existe una única causa que explique por qué una persona desarrolla una adicción al juego. La ludopatía es un trastorno multifactorial, que depende de la interacción de diversos factores biológicos, psicológicos y sociales. Algunos de estos factores son:
La predisposición genética
Algunas personas tienen una mayor vulnerabilidad biológica a desarrollar adicciones, debido a su herencia genética o a su funcionamiento cerebral.
La personalidad
Ciertos rasgos de personalidad, como la impulsividad, la búsqueda de sensaciones, la baja autoestima o el perfeccionismo, pueden favorecer el desarrollo de una adicción al juego.
El entorno social
El ambiente familiar, social y cultural puede influir en la adicción al juego, tanto por la exposición al juego como por la falta de apoyo, la presión, el estrés o el aislamiento.
Hábitos aprendidos
El juego puede ser una forma de escapar de los problemas, de aliviar el malestar emocional, de obtener reconocimiento o de satisfacer necesidades insatisfechas. Estos refuerzos positivos o negativos pueden condicionar el comportamiento del jugador y reforzar su adicción.
¿Cuáles son los síntomas de la adicción al juego?
La ludopatía se manifiesta a través de una serie de síntomas que afectan a la conducta, al pensamiento y a la emoción del jugador. Algunos de estos síntomas son:
● La pérdida de control sobre el juego: el jugador no puede resistir el impulso de jugar, ni limitar el tiempo o el dinero que dedica al juego. El juego se convierte en una prioridad sobre otras actividades o responsabilidades.
● La negación o minimización del problema: el adicto niega o resta importancia a su adicción, y se engaña a sí mismo y a los demás sobre la gravedad de su situación. Asimismo, puede mentir, ocultar o manipular la información sobre su conducta.
● La dependencia emocional del juego: la persona que padece este trastorno necesita jugar para sentirse bien, para aliviar su ansiedad, su aburrimiento, su depresión o su ira. El jugador experimenta un estado de ánimo fluctuante, que depende de los resultados del juego.
● La tolerancia y el síndrome de abstinencia: cuando hablamos de tolerancia significa que el adicto necesita cada vez más dosis de juego para obtener el mismo placer o para evitar el malestar. Cuando no puede jugar, el jugador sufre síntomas físicos y psicológicos, como nerviosismo, irritabilidad, insomnio, sudoración, temblores o palpitaciones.
Efectos de la adicción al juego
La ludopatía tiene graves consecuencias para la vida del jugador y de su entorno. Algunas de estas consecuencias son:
● Problemas económicos: el jugador gasta más dinero del que tiene en el juego, y puede endeudarse, pedir préstamos, robar o empeñar sus bienes para seguir jugando. Incluso, hasta puede perder su patrimonio, su trabajo o su capacidad de generar ingresos.
● Problemas familiares y sociales: el ludópata descuida sus relaciones con su pareja, sus hijos, sus amigos o sus familiares, y puede perder su confianza, su afecto o su apoyo. En casos más severos, puede aislarse, mentir, engañar o agredir a sus seres queridos, y generar graves conflictos.
● Problemas de salud: la persona que padece adicción al juego puede sufrir problemas físicos, como dolores de cabeza, úlceras, hipertensión, insomnio o enfermedades cardiovasculares. A su vez, puede sufrir problemas psicológicos, como ansiedad, depresión, baja autoestima, culpa, vergüenza o ideación suicida.
Nuestro tratamiento para la adicción al juego
En el Instituto Europeo Alfi, sabemos que la adicción al juego puede afectar todos los aspectos de tu vida, pero también creemos en la posibilidad de una recuperación plena. Nuestro tratamiento para la ludopatía está diseñado para abordar el problema desde sus raíces, brindándote las herramientas necesarias para construir un futuro libre de la carga del juego compulsivo.
Evaluación integral
Comenzamos con una primera evaluación detallada para comprender tu situación única. Esto nos permite diseñar un plan de tratamiento adaptado a tus necesidades específicas.
Desintoxicación digital
Para aquellos afectados por el juego en línea, implementamos estrategias para reducir y eliminar el acceso digital, promoviendo un ambiente libre de tentaciones.
Terapia individual
Nuestros terapeutas trabajan contigo individualmente para explorar las causas subyacentes de la ludopatía, desarrollar habilidades de afrontamiento y fomentar la conciencia emocional.
Terapia grupal
La conexión con otros que comparten experiencias similares es fundamental. Nuestras sesiones grupales ofrecen apoyo mutuo, comprensión y la oportunidad de aprender estrategias efectivas de manejo.
Terapia familiar
Reconocemos el impacto de la ludopatía en las relaciones familiares. La terapia familiar es una parte integral de nuestro enfoque para abordar y sanar las dinámicas familiares afectadas.
Terapia cognitivo conductual (TCC)
Trabajamos para cambiar patrones de pensamiento disfuncionales, identificar y modificar conductas de juego compulsivas, y fortalecer las habilidades de afrontamiento.
Desarrollo de planes de prevención de recaídas
Creamos estrategias específicas para prevenir recaídas, estableciendo metas realistas y empoderándote para mantener el control sobre tu vida.
En el Instituto Europeo Alfi, tenemos el compromiso de brindarte un camino claro hacia la recuperación. Creemos en tu capacidad para superar la adicción al juego y estamos aquí para apoyarte en cada paso del camino. La recuperación es posible, y nosotros estamos contigo en este viaje hacia una vida plena y libre de la carga del juego compulsivo.