La adicción al juego nace tras estar expuesto a continuos estímulos relacionados con el juego, las apuestas y las tragaperras. Los adictos se envuelven en el entorno de los juegos de azar y las apuestas dejando atrás su vida cotidiana.
La ludopatía se puede definir como una enfermedad, ya que la adicción al juego proviene de un trastorno que afecta a la vida social, familiar, laboral e incluso judicial. Está adicción ve afectada la capacidad de autocontrol del paciente y le resulta complejo parar de jugar, es incapaz de detener su impulso.
Cuando el juego comienza a mermar la vida cotidiana de la persona, y prevalece ante situaciones significativas, es ahí realmente cuando empieza el problema. Actualmente, el juego no solo está presente en las salas de apuestas o casinos, los móviles y ordenadores son armas perfectas para aumentar la adicción.
Dejar la ludopatía a un lado puede ser una tarea más sencilla si el paciente se pone en manos de unos especialistas cualificados, como es el caso del Instituto Europeo Alfi. En nuestras instalaciones ayudamos a los adictos mediante tratamientos personalizados.