La adicción al cannabis, también llamada adicción a la marihuana o -más vulgarmente- adicción a los porros, es una de las más complicadas de tratar, puesto que los afectados sufren un alto grado de negatividad al tratamiento. La experiencia de nuestro centro de desintoxicación en Madrid nos ha demostrado que el cannabis es la droga con mayor resistencia a recibir terapia.
Por lo general, el adicto al cannabis defenderá siempre que la droga no tiene efectos colaterales sobre él. No obstante, es sencillo detectar las consecuencias que deja el cannabis en el consumidor frecuente.
¿Qué es el cannabis?
El cannabis sátiva, es una planta que puede llegar a medir seis metros de altura en las condiciones más beneficiosas. Esta planta es un vegetar diólico, es decir, tiene una planta macho y otra hembra que crecen por separado. En ambientes húmedos genera una gran cantidad de resina, lo que hace que sea muy pegajosa al tacto, es un mecanismo de defensa natural frente a la humedad del ambiente.
El sexo de la planta se diferencia por las flores, las masculinas se pueden apreciar a simple vista, puesto que se agrupan en racimos. Por su parte, las femeninas son casi invisibles a la vista, y se acumulan en las espigas.
El cannabis tiene alrededor de sesenta componentes, ellos destacan el THC (tetrahidrocannabinol), un elemento muy conocido por su carácter psicodélico. La mayor parte de los componentes se encuentran en las flores de la planta hembra, en los tallos presenta menos cantidad.
En el caso del cultivo clandestino, se han desarrollado grandes variantes hasta ahora desconocidas, denominadas sinsemilla. Estas variantes tienen una gran cantidad de cannabinoles que los cultivados por vía tradicional o silvestre.
Formas comunes de consumir cannabis
Por otro lado, se debe mencionar el consumo, este factor dependen del tipo de elaboración, de este modo, se pueden clasificar los derivados del cannabis en 3 grupos:
- Marihuana: se prepara a partir de las hojas secas de las flores, contiene entre 6 y 14% de THC. Actualmente, con los laboratorios clandestinos este porcentaje puede ser mayor.
- Hachís: la tonalidad puede variar dependiendo del origen de la planta. Por ejemplo, el verde oscuro o marrón procede de Marruecos y el negro del Líbano y Nepal. Este derivado contiene un 15 o 30% de THC, dependiendo de la variación.
- Aceite de hachís: se preparan a partir de un proceso de destilación de la planta con disolventes orgánicos. Dependiendo del método utilizado y los aparatos de destilación se puede llegar a conseguir hasta un 60% de THC.
Los métodos de consumo no son muy variados, destacan dos:
- Fumada o inhalada: la forma más frecuente de consumo de cannabis es mezclarlo con tabaco y marihuana y liarlo en forma de cigarrillo (denominados popularmente porro). Otro método de consumo es con pipas o shishas, un recipiente donde se coloca líquido con el objetivo de humidificar el humo.
- Oral: la resina se introduce en los alimentos elaborando bollos, caramelos, pasteles, etc. En ocasiones, el cannabis o la marihuana se emplean para elaborar productos destinados al consumo alimentario.
¿Cómo detectar la adicción al cannabis?
El cannabis es la droga ilegal más consumida en España. La tasa de consumo de cannabis se acerca al 20% de la población, además España es el tercero país europeo con mayor tasa de consumo. En este contexto, es importante conocer los aspectos más preocupantes de la droga y sus riesgos. Además, de los principales síntomas para detectar la adicción.
Síntomas adicción al cannabis
Principalmente, la consecuencia más preocupante del consumo de cannabis es desarrollar la adicción a la sustancia. Cuando se consume de manera excesiva, el cannabis estimula determinados núcleos en el cerebro que a su vez cambian su estructura y se da paso a la adicción
Las personas adictas al cannabis suelen presentan una serie de síntomas muy comunes relacionados con el síndrome de abstinencia física y emocional. Síntomas más relevantes:
- Cambios emocionales y de comportamiento bruscos.
- Irritabilidad.
- Baja energía.
- Problemas para dormir.
- Autoestima baja.
- Problemas laborales, sociales y familiares.
- Consumo.
- Preocupación.
- Problemas de rendimiento.
- Desinterés.
- Poco apetito.
- Malestar físico.
- Agitación.
Efectos adicción al cannabis
El consumo de cannabis tiene efectos negativos en el físico y la mente de los consumidores frecuentes. Por lo general, los efectos pasan por una sensación de felicidad y relajación momentánea.
Además, aumenta considerablemente el apetito y la percepción de los colores y sonidos. Sin embargo, en un período largo de tiempo, los efectos se pueden ver agravados, llegando a provocar falta de atención, fallos en la memoria y ataques de ansiedad, entre otros.
Entre los efectos negativos más comunes se encuentran:
- Náuseas.
- Vómitos.
- Reducción de la reacción.
- Desarrollo de adicción.
- Desorientación.
- Fallos en la coordinación.
- Fallos en el equilibrio.
- Psicosis cannabica.
- Ataques de ansiedad, pánico, paranoias y depresión.
Causas abuso del cannabis
Para la adicción al cannabis no hay una causa específica, sino una serie de factores que pueden afectar y generar más riesgo de abusar del cannabis. Principales causas de la adicción:
- Predisposición genética.
- Problemas en la toma de decisiones.
- Presión social.
- Fácil acceso a la droga.
- Existencia de previos trastornos de salud mental.
¿Cuáles son los riesgos de la adicción a la marihuana?
Como ya hemos dicho, existe todo un debate en torno a la adicción a la marihuana. No obstante, hay estudios científicos que han demostrado cuáles son los riesgos tanto a corto, medio y largo plazo.
Por ejemplo, está comprobado que la adicción a los porros causa problemas en la concentración y la memoria a medio plazo. Sobre todo, en los jóvenes, teniendo en cuenta que es la mejor etapa de la vida para estudiar. Por lo que muchos, al presentar problemas de aprendizaje deciden abandonar sus carreras mucho antes.
Por otra parte, cuando se deja este hábito, algunas de esas capacidades pueden recuperarse, por lo que dejarlo siempre será la mejor opción.
Cuando se consume de manera habitual se puede crear dependencia y posteriormente adicción, siendo entre el 7% y 10% de los casos. Estos porcentajes son mucho más altos que en décadas pasadas. Las formulaciones que se comercializan hoy tienen una mayor concentración de THC del que se consumía en los 70, por ejemplo.
Un estudio realizado en Estados Unidos, demuestra que los jóvenes que consumen de manera habitual marihuana tienen un riesgo mayor. Tienen hasta un 40% más de probabilidades de sufrir depresión, alucinaciones, ansiedad o diferentes tipos de enfermedades mentales. Sobre todo, en el caso de las mujeres
Sobre los riesgos a nivel sexual, la adicción a la marihuana cambia la estructura en las células del esperma masculina, llegando a deformarlas. En las mujeres, altera de manera abrupta el ciclo menstrual y su capacidad reproductiva.
Consecuencias de la adicción a la marihuana
La adicción a la marihuana puede presentar diversas consecuencias tanto a nivel físico como a nivel psicológico.
Consecuencias físicas
En primer lugar, están los problemas respiratorios. Las personas adictas a los porros suelen presentar cuadros de bronquitis o ataques de asma. También se presentan problemas de corazón, donde la hipertensión, las cardiopatías y las arritmias son las más comunes.
Finalmente, pero no menos importante están los problemas de pulmón, tales como fibromas o incluso, cáncer.
Consecuencias psíquicas
Son las más frecuentes y, sobre todo, preocupantes para los especialistas. Además, hay que tener presente la edad de la mayoría de los adictos, que cada vez son más jóvenes; pues las adicciones en adolescentes son uno de los grandes problemas de las sociedades actuales.
Estas son las consecuencias psíquicas más evidentes de la adicción al cannabis.
Agilidad mental reducida
La agilidad mental es una de las primeras en verse afectadas. Incluso, llegan a presentarse casos donde no se pueden resolver situaciones diarias comunes. Por ejemplo, decidir por una marca en el supermercado o responder de manera adecuada ante las responsabilidades laborales.
Poco deseo sexual
Así como cambia el ciclo menstrual y deforma las células de los espermas, el consumo de cannabis disminuye la líbido sexual. Esto a su vez trae problemas de autoestima y conflictos con la pareja. A pesar de que poco se habla de esta consecuencia, es una de las más frecuentes. Además, puede presentarse a cualquier edad.
Apatía
La apatía y la pérdida de motivación son de las principales características de quienes fuman porros. Sin importar el entorno, ya sea laboral, de pareja o familiar, simplemente se pierde el interés. Este problema llega a ser causante de divorcios, despidos y, en general, de graves problemas personales.
Fallos en la memoria
Otra de las consecuencias más comunes del consumo regular de cannabis trae consigo un grave problema de memoria. El paciente, en muchos casos, tardará en recordar detalles que incluso han pasado en menos de 24 horas.
Problemas psíquicos mayores
El cannabis es una sustancia psicoactiva y por sí sola es peligrosa. Tiene la capacidad de activar enfermedades severas como ansiedad, depresión, alucinaciones o incluso, cuadros de esquizofrenia.
Estos problemas son especialmente peligrosos en edades jóvenes. Has de tener en cuenta que el sistema nervioso se encuentra aún en fase de maduración, proceso que puede verse truncado y alterado.
Otro grave peligro es el combinar el consumo de cannabis con alcohol como con otras drogas, ya que los efectos serían mucho más potentes. Por supuesto, los efectos negativos serán mucho mayores.
¿Cuesta dejar de fumar porros de marihuana?
Todo dependerá de lo avanzado que sea el nivel de consumo o la cantidad que se fume. Es un trabajo diario que requiere de paciencia y determinación, como con cualquier adicción.
Además, dejar de fumar porros trae consigo una serie de beneficios que se pueden notar de manera casi inmediata. Durante las primeras semanas, el sistema nervioso central empieza a activarse nuevamente. Produce lo que se conoce como un despertar mental.
Por supuesto, el síndrome de abstinencia hará las cosas un poco complicadas. Por eso, es recomendable buscar apoyo psicológico y realizar actividades físicas. Por supuesto, nunca debe ser reemplazada por otras drogas ni mucho menos el tabaco o alcohol.
¿Cómo dejar los porros de marihuana?
Son muchas las preguntas que se hacen en torno a este tema. Lo más importante es tomar la decisión de dejar los porros. Este proceso debe hacerse con ayuda, ya que en soledad es mucho más complicado. Contar con la ayuda de un centro de desintoxicación es la mejor opción, además de tener el apoyo de la familia o los amigos cercanos.
Una norma es no engañarse. Hay que ser siempre sincero respecto a la cantidad y la continuidad en la que se consume. Una vez reconocido el problema, es momento de dar un paso al frente.
Tratamientos en Instituto Europeo Alfi
Si eres consumidor compulsivo de marihuana o cannabis, contacta con un terapeuta experto en adicciones. En Instituto Europeo Alfi podemos ayudarte, somos un centro de adicciones en Madrid donde te ayudaremos a tratar tu patología.
En Alfi disponemos de terapias individuales personalizadas para salvaguardar la intimidad de nuestros pacientes. No obstante, si el caso lo requiere, se puede optar por terapias grupales con otros pacientes. De este modo, comparten vivencias, expectativas y necesidades.
Ponte en manos de especialistas para tratar tu adicción al cannabis. Si, por el contrario, conoces a alguien que pase por esta situación, no lo dudes más, contacta con nosotros.